El pronóstico a largo plazo (pronóstico) para personas con síndrome de Klippel-Feil Síndrome varía dependiendo de las características específicas y la gravedad en cada persona afectada.
En general, las personas con un mínimo de participación puede llevar una vida normal y activa y puede que no tenga restricciones significativas o síntomas. Las personas con anomalías adicionales y/o formas graves de la enfermedad pueden requerir cuidado y seguimiento de rutina, pero puede tener un buen pronóstico, si los síntomas y las complicaciones son tratadas a tiempo.
Las complicaciones asociadas con el síndrome de Klippel-Feil Síndrome normalmente no se desarrollan antes de la edad de 25 años y algunos pueden ser tratados quirúrgicamente.
Pero debido a que el síndrome de Klippel-Feil Síndrome es progresivo y dependiendo de la gravedad de otras condiciones asociadas con ella, se ha encontrado que la esperanza de vida puede ser de entre 30 - 45 años de edad, en algunos casos, no en todos.