Siempre y cuando la persona pueda realizarlo, todo ejercicio es bueno.
La hidroterapia es lo más recomendado ya que dentro del agua, el ejercicio es más llevadero y más eficaz.
Evitar el esfuerzo más allá de lo que el cuerpo pueda soportar.
En mi caso, todo el esfuerzo que hago de más, me desgasta demasiado y la fuerza no la recupero.